El sistema nervioso (columna vertebral, medula espinal y cerebro) es el órgano más importante del cuerpo ya que controla todas las funciones del cuerpo.
Cuando hay una interferencia en este sistema nervioso ( y más bien en la columna vertebral) que impide su funcionamiento al 100% de sus capacidades, puede resultar una disminución de funcionamiento del cuerpo, enfermedades, síntomas, una disminución de la calidad de vida…
Por eso, podemos entender la importancia de la columna vertebral en el embarazo, parto y post parto.
Durante el embarazo, la mujer puede sufrir varios estreses que sea al nivel físico, químico o emocional.
Con la quiropráctica, la mujer embarazada tiene más energía, una mejor postura, una mejor armonía en su cuerpo y mente, menos desequilibrios, sufre mucho menos de dolores de espalda, de ciática, de dorsales, de sínfisis púbica, de bajo vientre, de lados del abdomen, de nauseas, de estreñimiento, de problemas de circulación, de cambios al nivel hormonal y emocional, de la pelvis….
Efectivamente, después de los ajustes quiroprácticos, el cuerpo libera dopamina y endorfinas, que permiten a la mujer embarazada de encontrar un bienestar, menos estrés y una mejor salud.
Al tener menos tensiones en la matriz (en el útero y sus ligamentos), el feto tiene espacio suficiente para moverse bien y consigue coger una buena postura para el parto.
Esto, junto con el buen alineamiento de la columna vertebral, el buen equilibrio de la pelvis y los consejos que te da tu quiropráctico ( posturas, yoga para embarazadas, pasear, bailar, actividad física, nutrición, agua, emociones…), permite lograr un parto más seguro, más rápido, más agradable con menos recursos exteriores ( forceps, ventosa, cesaria…) traumas o complicaciones, que sea por la madre o por el bebé.
En un estudio hecho en hospitales donde incorporan el cuidado quiropráctico durante el embarazo, encontraron un 50 % menos en necesidades de usar anti dolores durante el parto (como epidural por ejemplo) gracias a los ajustes durante el embarazo.
En otro estudio, se nota que el cuidado quiropráctico reduce el tiempo del parto: 24% menos de tiempo para una mujer que daba la luz por primera vez y 39% por las demas (que ya habian dado la luz otras veces).
Y por fin, al tener un parto más agradable, con menos complicaciones, el post parto y la cuarentena se vive mucho mejor. La mujer se recupera mejor y más rapidamente, el bebé duerme mejor, dar el pecho resulta más facil y con menos problemas ( grietas, mastitis…) y la madre tiene una mejor energía y mejor estado emocional ( menos depresíon post parto, menos “baby blues”…).
El quiropráctico tiene una formación en embarazos y pediatría, es experto en técnicas adaptadas para mujeres embarazadas.
Afortunadamente, los padres de hoy en día son cada vez más conscientes de la importancia de la biomecánica de la pelvis de la madre durante el embarazo. Dar la debida atención no sólo dará lugar a un embarazo más cómodo, pero optimizará los sistemas de desarrollo del bebé en el útero y contribuira hacia el logro de posicionamiento fetal óptimo para un parto más fácil y segura tanto para la madre como para el bebé.
Cuando los padres entienden la importancia de la función del sistema nervioso y el trauma potencial de nacimiento, reconocen la importancia de chequear a sus bebés por un quiropráctico inmediatamente después del nacimiento.
Referencias:
. ICPA 4kids
. JMPT ( Journal of Manipulative and Physiological Therapeutics) julio-agosto 2002.
. P. Frietag MD, PhD, May 1987
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